
Con ese propósito, Artigas desplazó sus fuerzas desde Mercedes en dirección al sur, llegando a ocupar la población de Nuestra Señora de Guadalupe; actual ciudad de Canelones y capital del mismo Departamento, distante de Montevideo alrededor de 40 Kms.
El gobernador español de Montevido, envió al encuentro de Artigas un contingente militar de unos 1.200 hombres al mando del Capitán José de Posadas.
Los soldados españoles, eran militares profesionales, dotados de 6 cañones de artillería, 2 obuses lanzadores de granadas explosivas, y buen armamento de fuego, fusiles que eran de los más modernos de su época. La milicia revolucionaria estaba compuesta de unos 400 soldados de a pié y 600 jinetes. Los españoles estaban instruídos en la realización de maniobras militares y en el empleo eficiente de su armamento; por su parte, los criollos eran hombres de campo, hábiles jinetes, y expertos en el manejo de sus utensilios para picanear y “bolear” el ganado cerril.
El enfrentamiento tuvo lugar el 18 de mayo de 1811 en campos próximos al pueblo de Las Piedras, hacia las 11 de la mañana.
Los españoles, que habían llegado por el camino desde Montevideo, adoptaron su posición de batalla sobre una zona de altura, muy cerca del Arroyo de Las Piedras que quedó a sus espaldas.
Artigas, que había ubicado su fuerza al frente, destacó en línea directa a la posición española un grupo de infantería al mando de Antonio Pérez, que amagó un ataque acercándose a la distancia de alcance de tiro de los trabucos españoles, pero cuando éstos abrieron fuego simuló una retirada en derrota. Eso provocó que los españoles salieran de su ventajosa posición para perseguirlos; circunstancia en la que el grupo de caballería artiguista, al mando de Manuel Artigas, logró infiltrarse por el flanco izquierdo del contingente español en un movimiento envolvente, y llevó a cabo su ataque, quedando los españoles entre dos fuerzas atacantes.
La batalla duró varias horas. Hacia las 5 de la tarde las tropas españolas habían quedado derrotadas; y los revolucionarios americanos habían obtenido la primer victoria sobre los españoles. Posadas izó la bandera blanca y se rindió ante Artigas; en uno de los episodios que fueron luego tema de una de las pinturas patrióticas de Juan Manuel Blanes.